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Maria Alejandra Ochoa

Maria Alejandra Ochoa

Admiro el trabajo que se hace en favor de la igualdad de genero y la erradicación de toda forma de violencia en contra de mujeres y niñas

LA VIOLENCIA DE GÉNERO ALREDEDOR DEL MUNDO, UNA EMERGENCIA GLOBAL

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Por: Maria Alejandra Ochoa

LA VIOLENCIA DE GÉNERO ALREDEDOR DEL MUNDO, UNA EMERGENCIA GLOBAL

La trágica situación de las mujeres y niñas en Afganistán, aunada a la condición de guerra que ha menoscabado los derechos humanos y la calidad de vida de la población afgana por más de diez años, ha levantado voces y asombro de organismos internacionales, gobiernos, organizaciones no gubernamentales y demás personas desde cualquier punto del planeta. Sin embargo, nos preguntamos si es solo en Afganistán, que esto sucede o pasa también en algún otro país; lamentablemente la respuesta nos abruma porque  en países desarrollados y en vías de desarrollo, cada segundo, minuto, hora y día alguna mujer y/o niña sufre o es víctima de algún acto de violencia de género por el solo hecho de ser pertenecer al género femenino.

Si damos la vuelta al mundo virtualmente, y nos desplazamos por Australia, México, Venezuela, Estados Unidos, Noruega, Japón, China, Malasia, Irak, Arabia Saudita, Malasia, Guatemala, Rumania, Bélgica, Francia o por cualquiera otra ciudad , comarca, o villa,rural y/o urbana, no encontraremos igualdad de género y proporcionalmente conseguiremos estadísticas alarmantes de violencia de género y femicidio.

Los derechos de las mujeres y niñas deben estar en el centro de la respuesta mundial a la crisis actual. En un informe leído ante el Consejo de Derechos Humanos (CDH) de la Organización de Naciones Unidas (ONU) en Ginebra,  Michelle Bachelet indicó que su oficina tiene conocimiento de hechos que van desde “ejecuciones sumarias” a “restricciones a los derechos de las mujeres”, “reclutamiento de niños soldados” y “represión de las protestas pacíficas y de la expresión de la disidencia”.

Por ejemplo, una de cada tres mujeres ha experimentado violencia física en Australia, y cerca de una de cinco mujeres ha sufrido violencia sexual, de acuerdo a cifras de la Oficina de Estadísticas de Australia en 2019. Estas cifras son aún más altas en la población aborigen australiana. Los expertos dicen que la violencia de género no es un caso atípico entre las naciones desarrolladas. La violencia domestica, es descrita por la Organización Mundial de la Salud como la principal causa de violencia contra las mujeres a nivel mundial.  Según Naciones Unidas, en África y América, es más probable que las mujeres sufran de femicidios que en Oceanía.

En México, en los primeros cinco meses de 2021, los feminicidios se han incrementado un 7,1% con respecto al mismo periodo del año anterior, según los datos que ha aportado la secretaría de Seguridad Pública, Rosa Icela Rodríguez. De enero a mayo, 423 mujeres han sido asesinadas por razón de su género. Otros delitos como las violaciones todavía han crecido más: un 30% en comparación con los mismos meses de 2020, según cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.

Y si hablamos de Venezuela, de enero a junio de 2021 hubo 125 femicidios consumados en el país. El Observatorio Digital de Femicidios del Centro de Justicia y Paz (Cepaz) documentó esta estadística. Reseñando además que hubo 49 femicidios de mujeres venezolanas en el exterior. ¿Qué podríamos hacer desde cada rincón urbano o rural, desde nuestros hogares, escuela, entornos comunitarios?

CONSTRUIR UNA VISIÓN COMPARTIDA DE LO QUE NECESITA SER CAMBIADO

Seguimos muriendo por el hecho de ser mujeres, entonces hagamos una contribución consciente y positiva , de diversas maneras,como algunas descritas a continuación.

  • Compartir una hoja de ruta entre diferentes organizaciones, grupos y comunidades.

  • Visibilizar la emergencia global y la emergencia de Venezuela.

  • Ser agentes sociales de cambio en nuestros hogares, comunidades y entornos incluyendo los virtuales.

  • Todas contamos y no queremos una menos.

  • De-normalicemos la violencia de género. Dejemos atrás el “olvídalo o no importa” cuando alguien nos quiere silenciar porque protestamos ante las distintas formas de violencia a las que somos sometida cada día.

  • Todas tenemos algo que ofrecer desde nuestra diversidad, la diversidad es un activo y capital importante para la innovación y cambio.

  • Impulsemos la sororidad.

  • Olvidemos el silencio, no hay peor acción negativa que callar ante todas las atrocidades que sufren mujeres y niñas alrededor del mundo.

  • Recordemos que el patriarcado siempre reacciona contra los derechos de las mujeres y niñas y que la voluntad política sesgada limita el cambio para construir sociedades con igualdad de género.

  • Sigamos construyendo redes de apoyo, ayuda, disertación, co-creemos espacios de igualdad de género como modelo y pauta para reconstruir la sociedad que nos merecemos.

    Como dijo Maya Angelou:  Una mujer sabia no quiere ser enemiga de nadie; una mujer sabia se niega a ser la víctima de nadie”